Debemos tener en cuenta las siguientes recomendaciones para una ciudadanía digital adecuada:
Pide permiso antes de etiquetar fotografías subidas por otras personas.
Puede ser que a pesar de ser publicadas online no sea conveniente estar etiquetado/a.
Utiliza las etiquetas de manera positiva, nunca para insultar, humillar o dañar a otras personas.
Ayuda a crear el espacio agradable y de confianza que a todos y todas nos gusta compartir
Mide bien las críticas que publicas.
Expresar tu opinión o una burla sobre otra persona puede vulnerar sus derechos e ir contra la ley. La libertad de expresión termina donde comienza los derechos de los demás. La injuria, la calumnia y otras acciones contra el honor o la intimidad son delitos.
No hay problema en ignorar solicitudes de amistad, invitaciones a eventos, grupos,etc.
Si lo hacen contigo no insistas ni pidas explicaciones.
Evita la denuncia injusta de SPAM para no perjudicar a quienes hicieron comentarios correctos.
La información interesante y veraz es un tesoro.
Usa las opciones de denuncia cuando esté justificada la ocasión.
Realizar acusaciones a la ligera o injustas genera desconfianza y enfado.
Pregúntate qué información de otras personas expones y asegúrate de que no les importa
En ocasiones contamos aspectos de nuestra vida con otras personas o de la vida de los demás, sin tener en cuenta cómo les puede afectar que eso se sepa. Respeta la privacidad de los demás, como te gustaría que te respetasen la tuya.
Para etiquetar a otras personas debes hacerlo sin engaño y asegurarte que no les molesta que lo hagas.
Cuando etiquetas a alguien estás aportando mucha información que además en muchos casos, se propaga de forma inesperada e incómoda.
No puedes publicar fotos o vídeos en las que salgan otras personas sin tener su permiso como normal general.
La imagen de cada cual es un dato personal y el derecho a decidir cómo se utiliza le pertenece a cada uno en exclusiva.
Antes de publicar una información que te han remitido de manera privada pregunta si lo puedes hacer.
En redes sociales la información circula a gran velocidad de un lado a otro y lo que es privado se puede convertir en un secreto a voces.
Facilita a los demás el respeto de tu privacidad e intimidad.
Comunica a tus contactos, especialmente a los nuevos, cómo quieres manejarlos.
Deja claro tu criterio para que lo puedan respetar diciéndoles qué cosas admites como por ejemplo que reutilicen fotos que puedan ver en tus álbumes privados, que te etiqueten sin permiso o que expongan datos acerca de ti en páginas a la vista de otros.
Recuerda que escribir todo en mayúsculas puede interpretarse como un grito.
Se trata de un acuerdo de una norma no escrita que muchas personas utilizan. Tenerla en cuenta no supone esfuerzo y ayuda a entenderse bien en cualquier circunstancia.
Usa los recursos a tu alcance (emoticonos, símbolos, dibujos…) para expresarte mejor y evitar malos entendidos.
El estado de ánimo, las diferencias culturales o sociales, las experiencias previas, pueden dificultar la comunicación entre personas, más aún si no están cara a cara. Comprender y utilizar símbolos de apoyo te ayudará a esquivar problemas por malas interpretaciones.
Ante algo que te molesta trata de reaccionar de manera calmada y no violenta.
Nunca actúes de manera inmediata ni agresiva. A veces las cosas no son lo que parecen. Puede que simplemente busquen la provocación o el engaño y si se reacciona mal habrá conseguido su objetivo. Puede tratarse de errores o acciones no intencionadas
Dirígete a los demás con respeto, sobre todo a la vista de terceros.
Si alguien comete un error, imprudencia o te molesta, sé amable al hacérselo ver y si es posible hazlo en privado.
Lee y respeta las normas de uso de las redes sociales.
No todas las redes sociales tienen las mismas reglas. Sin embargo, siempre son las normas de obligado cumplimiento para todos.